El pequeñín de la casa está ya presentado, aunque Mercedes tiene que seguir mostrando sus versiones AMG. Así pues, el SLK con motor V8 sigue haciendo de las suyas por Alemania, y ahora con más motivo, con menos protecciones.
La estética del "normal" ya nos gusta, pero aquí las cosas cambian. El precio será alto, como de costumbre, pero es que pagarlos merecerá la pena. Por fuera será típico de los AMG, con carácter deportivo y unas prestaciones deliciosas.
Lo que laterá debajo del capot ya lo sabemos desde hace meses, un bloque V8 de gasolina apoyado por un cambio automático. Para esta ocasión creo que Mercedes incluirá el 6.3 (al igual que el C 63 AMG Coupé), aunque estoy confuso.
Lo que laterá debajo del capot ya lo sabemos desde hace meses, un bloque V8 de gasolina apoyado por un cambio automático. Para esta ocasión creo que Mercedes incluirá el 6.3 (al igual que el C 63 AMG Coupé), aunque estoy confuso.
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