En el vídeo puedes ver como totalmente reluciente sale a pasear felizmente. No está justificable esa velocidad en esa calle, pero sabemos que tanto tú como yo nos gustaría poder exprimir ese V8 y por cada acelerón, una sonrisa (y un golpe en la nuca).
Aparentemente el conductor salió totalmente ileso del accidente y por su parte, el Italiano recibió golpes en toda su parte frontal, casi deborada por ese arbolito intacto. Por lo menos sabemos que no es un siniestro. El motor se conserva en la parte posterior, aunque arreglarlo saldrá por una pasta.
Ahora puedes seguirme en Twitter.